Llega la Navidad y empieza una especie de maratón a ver quién compra más. Una precipitada carrera que no acaba hasta que llegamos exhaustos a la meta de la cuesta de enero. Según el estudio de consumo navideño de Deloitte España, cada hogar estima gastar estas fechas una media de 634 euros, muy en consonancia con las cifras del año pasado, que ascendieron a 631.
El 40% de los encuestados afirma que gastará más en sus compras navideñas de este año. La razón estriba en que aún los consumidores disponen del ahorro que generaron durante la pandemia. Además, un 69% no muestra preocupación a la hora de afrontar gastos futuros, lo que impactará en los patrones de consumo.
Precaución, amigo consumidor
Pero estos optimistas datos de una parte de la población, no deben impedirnos tomar una serie de precauciones para no tener sorpresas financieras en el último momento.
En lo que respecta a la categoría de comida y bebida, en la que vamos a centrar el artículo, su consumo ha crecido un 3,3% respecto del año pasado. Llenar la mesa de ricos manjares sigue siendo un objetivo prioritario para el español en estas fechas.
Preparar un menú navideño no tiene por qué arruinar nuestros bolsillos, si tomamos las medidas necesarias. El resultado puede ser excelente sin llegar al despilfarro.
Un menú cerrado
Según los entendidos, contar con un menú cerrado es la fórmula ideal para elaborar un presupuesto realista, además de saber el número exacto de comensales. De esta manera se conocerá a ciencia cierta los platos que vamos a elaborar, sin agregar después caprichos o ideas de última hora.
Si el solomillo, el pescado o el pavo están excesivamente caros, puedes sustituirlos por aves sabrosas como el pato o el pollo. El secreto estará en la receta que uses -las hay familiares, que pasan de generación en generación-, así como en las guarniciones que lo acompañen.
Adelantar las compras
Lo ideal es comprar antes de diciembre, mes en que los precios se suelen incrementar, y hacerlo de manera escalonada en vez de en una única compra. Así el bolsillo no se resentirá tanto. Busca las ofertas del 2X1 o 3X2 y toma partido por las marcas blancas y los productos de temporada, que abaratarán tu cesta.
Congela para ahorrar
Este año, el marisco seguirá siendo el rey, especialmente los langostinos, las gambas y las cigalas. El jamón es otro de los productos fijos en nuestras mesas navideñas, seguido por el cordero y el cabrito. Los quesos, los caldos, los consomés y los turrones tampoco faltarán a la cita.
Para ahorrar es preciso saber que tanto mariscos, como carnes y pescados se pueden congelar sin problemas para ser cocinados durante las fiestas y evitar los precios de infarto de última hora. Todavía se puede ahorrar aún mas si compramos meses antes los productos congelados. Otra idea es preparar en el momento de su adquisición algunos platos, caldos o acompañamientos elaborados con productos frescos y mantenerlos congelados hasta la fecha. Así ahorraremos dinero y tiempo.
Menos dulces navideños
Adquirir por adelantado bebidas, latas y conservas y almacenarlas en casa hasta que llegue el momento es otra manera de evitar gastar más de la cuenta. Tampoco hay que acumular productos navideños como turrones y polvorones, que son productos caros. ¿Quién no ha tenido rodando por casa mantecados de limón o coco hasta el verano? Evitemos, por tanto, adquirir varias cajas y de diferentes tipos. Con una selección representativa tenemos más que suficiente.
Además, estas navidades los españoles optarán por una alimentación más saludable. El 21% tiene intención de reducir el consumo de determinados productos como los dulces, los turrones y la carne. Las razones que esgrimen son la salud, un 54%; la falta de presupuesto, el 35% y la necesidad de controlar el peso, el 32%. Lo importante es que controlemos los gastos y que compremos con cabeza. Las fiestas van a seguir siendo igual de agradables que en años anteriores, pero sin haber hecho un excesivo desembolso.
¡Feliz Navidad a todos!